Pues sí, que me perdone nuestro salmorejo o nuestro gazpacho, pero es que me encanta la crema fría de puerros, también conocida como Vichyssoise. Es tan fácil de hacer como nuestras cremitas nacionales. Vale, hay que cocinar un poquito más, pero está buenísima. Aquí os dejo mi versión.
Hay que tener en cuenta que se trata de una crema fría, por tanto yo os recomiendo que la hagáis de un día para otro.
Qué necesitamos (para dos – tres personas):
- 4 puerros
- 1 cebolla grande
- 4 patatas medianas
- 3 vasos de caldo de verduras/leche (*leer la receta)
- 1 brick de nata de cocinar (200 ml)
- perejil
- pimienta negra
- nuez moscada
- sal de hierbas o sal normal
- mantequilla
- aceite
Cómo lo hacemos:
Lo primero que tenemos que hacer es pelar las patatas, lavarlas y cortarlas en láminas. Las reservamos.
Ponemos a calentar una cazuela con un buen trozo de mantequilla. Cortamos la cebollita finamente y la sofreímos lentamente en la mantequilla.
Cogemos los puerros, los cortamos en rodajas finas y los lavamos bien con agua. Los echamos a la cazuela con la cebolla y lo dejamos pochar lentamente unos quince minutos.
Añadimos las patatas en láminas y seguimos rehogando un poquito más hasta que la patata se deshaga.
Pocedemos a echar el caldo. Aquí hay varias opciones; depende un poco de vuestra elección:
A) si queréis echar solo caldo.
Una de tres, o tenéis el caldo de cocer otras verduras, lo compráis hecho (yo nunca lo he comprado) o calentáis agua y disolvéis un tercio de pastilla de caldo de verduras).
B) si queréis echar caldo y leche.
Esta opción consiste en utilizar mitad de caldo y mitad de leche. Yo es la que prefiero. En este caso os recomiendo que echéis primero el caldo, dejéis que hierva un poco todo, lo quitéis del fuego, dejéis que enfríe y luego echar la leche.
C) si queréis echar solo leche.
Para tener una crema muy suave.
Yo siempre echo leche de vaca, pero si queréis probar con alguna leche vegetal… Se me ocurre leche de almendras… Podéis experimentar…
Como os he comentado yo me quedo con la opción B. Dejamos hervir todo unos diez minutitos.
Lo quitamos del fuego. Dejamos reposar un poquito. Incorporamos la leche y procedemos a triturar con la batidora. Nos quedará una crema espesita que aligeraremos con la nata. Seguimos reomiviendo.
Salpimentamos y añadimos un toque de nuez moscada.
Ahora lo podemos dejar en la nevera unas horas antes de servir para que así esté muy fresquita la crema. Para emplatar lo servimos en un plato hondo o en un bol, decorándolo con perejil picado y un chorrito de aceite de oliva virgen.
Espero que os guste tanto como a mí.